jueves, 10 de febrero de 2011

Los recuerdos de nuestra niñez... (para ti Daniel)

Ayer llego una noticia de esas que hacen sacudir los sentimientos, que hacen recordar lo que fue y lo que no pudo ser. Se fue un amigo de la infancia, se fue sin saber que lo recordaba bien.

"Los recuerdos de nuestra niñez..." decía el himno del Colegio Madrid. Lo cantaba con mucho gusto, con esa emoción que regularmente me invade cuando hago algo que me llena el alma. Estuve solo 4 años, importantes en mi vida, definitorios incluso.

Salté de una escuela pública, El Guadalupe Victoria, a una escuela particular. Mi papá era vocal o algo por el estilo y así es que llegue a ese Colegio, así conocí gente valiosa, amigos que recuerdo, con los que no pude vivir más cosas pero sin embargo vivi algunas buenas experiencias.

Juan Carlos Salazar, Giovanni Sades, Juan Carlos Amorrortu, Ares Zenteno, Sandro, Anel Punzo, Toño Rosique, Janito, Ana Laura Pascual... y Daniel Ordoñez, que hoy esta allá arriba disfrutando de la música mas bella de todas. Todos esos nombres y otros dieron sentido al significado de amistad, ellos fueron mis primeros amigos y hoy uno de ellos ya no esta entre nosotros.

Vaya este breve texto para ti Daniel que te adelantaste, que me hiciste traer esos recuerdos de nuestra niñez...




Rabia.

2 comentarios:

  1. Interesante, triste, doloroso... real. Es una rebanada de experiencia que nos ejemplifica la forma en la que transcurre la vida, evolucionándonos, alejándonos. Creemos tomar nuestras propias decisiones, aunque al ver las cosas en retrospectiva, en ocasiones parece no ser así.
    Y dime, Rabia, de esa cuadrilla de truhanes que compartieron contigo algunas otras rebanadas de vida, de esos a quienes te refieres como "los que dieron sentido al significado de amistad", ¿a cuántos frecuentas? ¿A cuáles mantuviste a tu lado? ¿A cuales despreciaste? (olvidar es una forma de desprecio, ¿no?) ¿A cuáles juzgaste?
    Dicen que el tiempo lo cura todo. Yo quisiera que así fuera, y que la dosis transcurrida pueda calificarse al menos de suficiente. Quisiera también entender algunas cosas que nunca me quedaron del todo claras.
    En vida, hermano. Te quisiera en vida, y no tener de ti sino silencio, distancia, y quizá "Los recuerdos de nuestra niñez, enésima entrega", donde posiblemente alguna vez escribieras sobre mí.
    Me da gusto percibirte bien, a través de tus textos; leerte y encontrarme con esa esencia de antaño aún prevaleciente.
    Te abrazo, compartiéndote lo muy grata que me resulta la colección de recuerdos de aquel entonces.
    Buena suerte, en todo, por siempre.

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  2. Mi salida del Madrid no fue sencilla, me dolió mucho, fue una etapa difícil en mi vida. Eso me hizo separarme física y mentalmente de cualquier representación del fracaso. No olvidar que uno era aun muy joven para entender las cosas que hoy se comprenden.

    Sin embargo, tuve a bien seguir frecuentando a un gran amigo y vecino, hasta que se presentaron situaciones que lastimaron no solo a mi, sino a mi familia... pero esa es historia; y si, creo fielmente que el tiempo cura todo, aunque no a todos.

    Hoy quisiera regresar el tiempo y poder pertenecer a ese grupo de amigos que se forjaron en el Colegio Madrid, pero Dios sabe porque pasan las cosas.

    Saludos.

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